¿Qué es la ansiedad y cómo enfrentarla?

¿Te cuesta concentrarte en ciertas situaciones? ¿Has sentido que te falta el aire o presión en el pecho? Estos pueden ser signos de ansiedad. A continuación, te hablaremos sobre qué es la ansiedad, cómo identificarla y qué hacer al respecto.
¿Qué es la ansiedad?
La ansiedad es una respuesta anticipatoria ante una amenaza que puede ser real o potencial. Es lo que se conoce como una respuesta adaptativa, es decir, ha prevalecido a lo largo de los años porque nos ha permitido responder a las amenazas de nuestro entorno y sobrevivir.
Esta emoción humana natural se caracteriza por la aparición de sentimientos como el miedo, la preocupación y la tensión. Cuando la ansiedad no desaparece y los síntomas empeoran con el tiempo, hablamos de trastorno de ansiedad.
La tolerancia a la ansiedad varía entre personas, pero cualquier individuo puede desarrollar síntomas del trastorno de ansiedad si esta interfiere en su vida diaria, se prolonga en el tiempo y es demasiado intensa. Para distinguir entre las dos, es clave observar la experiencia subjetiva del paciente, su impacto en la rutina diaria, su persistencia y la severidad de los síntomas.
¿Cuáles son los tipos de trastornos de ansiedad?
Existen diferentes tipos de trastornos de ansiedad, según los factores de riesgo y las causas de la ansiedad. Algunos de ellos son:
Trastorno de pánico
Este es un ataque repentino o breve de terror que provoca confusión, temblores, mareos, náuseas y dificultad para respirar. Pueden ocurrir después de experiencias de estrés prolongado o incluso sin ningún desencadenante. Alcanzan su nivel máximo a los 10 minutos o pueden durar horas.
Trastorno de ansiedad generalizada
Se produce por la preocupación excesiva y persistente sobre actividades, eventos de la vida, situaciones, objetos e incluso asuntos rutinarios. Es una ansiedad difícil de controlar, de estado permanente de angustia, que afecta la salud física de la persona.
Trastorno de ansiedad social o fobia social
Con la ansiedad social aparecen pensamientos negativos como el miedo escénico, la vergüenza y la preocupación por ser juzgado o humillado en situaciones sociales. Debido a los altos niveles de ansiedad, evitan espacios públicos y el contacto con otros, lo que afecta su vida cotidiana.
Agorafobia
La persona que sufre este trastorno evita eventos, situaciones o lugares en los que cree que podría quedar atrapada o escapar con dificultad. Por ejemplo, puede tener miedo de usar ascensores, salir de casa o usar el transporte público por una sensación de peligro inminente.
Fobias específicas
Ocurren cuando hay un miedo intenso e irracional hacia un objeto, animal o situación en particular que no representa peligro real. La persona afectada reconoce que el miedo es extremo e ilógico; sin embargo, es incapaz de controlar la ansiedad.
Ansiedad por separación
Es un trastorno que aparece en la niñez cuando ocurre la separación de los padres, otras personas que cumplan la función paternal o por alejarse de un lugar que proporcionaba seguridad o protección. En la edad adulta se presenta por miedo a la separación física o emocional.
Mutismo selectivo
Es un tipo de ansiedad que experimentan algunos niños que no pueden hablar en ciertos contextos o lugares, aunque tienen excelentes habilidades de comunicación verbal. Es considerada una forma extrema de fobia social.
A partir de la quinta edición del Manual Diagnóstico y Estadístico de Trastornos Mentales, sistema que clasifica los trastornos de ansiedad, ya no se incluyen el trastorno obsesivo-compulsivo, el trastorno de estrés postraumático ni el trastorno de estrés agudo.
¿Cuáles son los síntomas de la ansiedad?
Existen una serie de signos y síntomas comunes en las personas que sufren de ansiedad. Entre ellos se encuentran:
- Síntomas físicos: son las sensaciones somáticas que afectan la salud física de las personas, tales como mareos, aumento del ritmo cardíaco (taquicardia), sudoración, palpitaciones, temblores, molestias digestivas, fatigas, dolor de cabeza o de estómago y aumento en la frecuencia y urgencia urinaria.
- Síntomas psicológicos: las personas experimentan nerviosismo, deseo de huir, sensación de muerte inminente, inquietud, miedos irracionales, teman perder la razón o el control.
Cuando los síntomas de la ansiedad son persistentes, empeoran y afectan la rutina diaria del individuo, es muy importante acudir a un médico de confianza para evitar que esto escale a un problema de salud mental. En Sanarai puedes encontrar tu bienestar y paz mental: agenda tu sesión online hoy.
¿Qué causa la ansiedad?
Las causas de los trastornos de ansiedad son complejas, pueden interactuar entre sí o necesitar la presencia de múltiples factores. Algunas que se pueden identificar son:
- Genética: las personas con familiares que sufren un trastorno de ansiedad son más propensas a sufrirlo.
- Estrés: problemas familiares, en el trabajo, en las relaciones de pareja o interpersonales y situaciones frustrantes pueden desencadenar síntomas de ansiedad.
- Factores médicos: enfermedades mentales no tratadas, los efectos secundarios de algún medicamento, estrés prolongado por algún problema médico.
- Química cerebral: tiene relación con desajustes hormonales y señales eléctricas en la zona del cerebro.
- Abstinencia: las personas adictas a las drogas lícitas o ilícitas pueden sufrir de ansiedad tras dejar el consumo de estas sustancias.
En Sanarai te acompañamos en el proceso de mejorar tu salud mental. Para ello te ofrecemos las herramientas necesarias para identificar las causas de la ansiedad, manejar los síntomas y prevenir futuros ataques.
Diferencias entre la ansiedad y el miedo
En ocasiones se tienden a confundir los términos ansiedad y miedo, pero en realidad hay diferencias entre ellos.
El miedo es una respuesta ante amenazas inmediatas y específicas, mientras que la ansiedad se relaciona con amenazas futuras o percibidas. Ambos tienen funciones adaptativas, pero la ansiedad, si es excesiva, puede convertirse en un problema que afecta la calidad de vida y el bienestar de la persona.
Los cambios en el comportamiento que surgen ante el miedo o la ansiedad suelen manifestarse como conductas de evitación (evitar aquello que nos causa temor) o de confrontación (como enojarse o insistir en ganar una discusión).
¿Cómo prevenir tener ataques de ansiedad?
Aunque no se puede saber con certeza qué causa un trastorno de ansiedad, sí puedes reducir el impacto de los síntomas tomando las siguientes medidas:
- Mantenerte activo, en actividades que disfrutes y socializar para aliviar preocupaciones.
- Evitar el consumo de alcohol o drogas
- Tener un grupo de apoyo al que puedas acudir en caso de tener que afrontar un ataque de ansiedad.
- Ejecuta técnicas de relajación como la respiración. Te sugerimos, este ejercicio sencillo, pero muy efectivo:
- Ponte en posición cómoda e inhala lentamente por la nariz.
- Deja llegar el aire a tu estómago y sostén unos segundos.
- Exhala por la boca lentamente.
- Repite este ejercicio de 3 a 5 veces.
- Buscar atención médica para aprender a controlar los síntomas físicos y mentales. En casos graves, el especialista podría indicar antidepresivos, ansiolíticos, benzodiazepinas, betabloqueantes o inhibidores de la recaptación de serotonina que deben ser administrados solo por el tiempo recetado.
¿Cómo vivir con una persona con ansiedad?
Vivir con una persona que padece ansiedad puede ser un desafío tanto para ella como para ti. La ansiedad afecta el comportamiento, y las emociones de quienes la padecen, lo que puede generar malentendidos en la convivencia.
Sin embargo, con empatía y una buena comunicación, es posible crear un entorno de apoyo. Por eso, te damos las siguientes recomendaciones:
- Educarse sobre la ansiedad: el conocimiento sobre el tema te ayudará a entender mejor lo que vive una persona con ansiedad, cómo puedes manejar la situación y si es momento de recomendar terapia psicológica.
- Establecer una comunicación con empatía: no sirve decirle a una persona con ansiedad «no pienses en eso», «deja el miedo» o frases por el estilo. Ponte en el lugar de esa persona y sobre todo aprende a escuchar o simplemente a hacerle compañía, sin juzgar.
- Establecer límites personales: establece hábitos alimenticios sanos, periodos de sueño regulares y una rutina. Limita la exposición a situaciones que eleven el estrés o generen malestar.
- Saber cómo actuar ante un ataque de pánico: existen diferentes medidas que puedes aplicar para ayudar a una persona con ataque de pánico, como por ejemplo, orientarla para desacelerar la respiración, hacer compañía sin agobiarla, hablarle con frases cortas y simples, entre otras.
- Animar a buscar un especialista: en Sanarai te ofrecemos la opción de contar con un psicólogo online y con un enfoque personalizado. Tenemos profesionales de la salud mental en diferentes áreas como psicoanálisis, terapia cognitivo-conductual, psicoanálisis clínico, psicoterapia Gestalt, entre otras.
La ansiedad es una respuesta natural que, cuando no se gestiona adecuadamente, puede afectar tu bienestar diario. Si sientes que la ansiedad está afectando tu día a día, en Sanarai, te ofrecemos apoyo profesional para que recuperes el control de tu salud mental.
